Otra forma de coleccionar monedas, es dedicarse a las réplicas y reproducciones, en cuya comercialización no sólo no hay ningún delito sino que hasta son buscadas por diversos motivos. De hecho, lo ilegal es engañar al comprador haciendo pasar una reproducción por una moneda auténtica, pero si la moneda aparece claramente como una copia, es perfectamente legítima.
¿Por qué pueden ser útiles las réplicas?
Es interesante tener en cuenta que, por ejemplo en el mundo del arte, las réplicas y reproducciones constituyen actualmente una verdadera especialidad; inclusive existen museos de reproducciones, como el famoso Museo de Reproducciones de Bilbao, pues no solamente tienen una función educativa, sino que además acercan al público obras de arte cuyos originales difícilmente podrían disfrutar. En el mundo del coleccionismo de monedas, las réplicas pueden ser utilizadas por los numismáticos en exhibiciones o muestras, para evitar exponer costosas o raras piezas originales. Además, una reproducción puede ayudar a rellenar un hueco en una colección, por tratarse de una pieza difícil de encontrar.
Usos de las réplicas
Las colecciones de réplicas son muy populares, por ejemplo, entre los historiadores y los maestros. ¡Imagina el impacto que causaría en una clase, presentar las monedas de la viuda mencionadas en el Antiguo Testamento, o los denarios romanos de Julio César! También es necesario utilizar réplicas cuando se representan escenas históricas en el cine, el teatro o la televisión, para otorgar verdadero realismo a la interpretación. Otros amantes de las réplicas son los especialistas en comercialización, que adoran realizar campañas publicitarias con reproducciones de monedas. También pueden utilizarse réplicas o reproducciones para decoración, otorgando un toque de refinamiento y distinción.
Coleccionismo de reproducciones
En la actualidad, las reproducciones se han convertido en verdaderas piezas de colección, ya que según los especialistas, se encuentran casi a la misma altura que las piezas auténticas. Las reproducciones deben incluir un anagrama o letra, como por ejemplo una R o una C, y deben también tener alguna diferencia como las dimensiones o el metal, respecto de la pieza original. Otra forma de reproducción es la “recreación” de monedas, que consiste en inventar piezas artísticas de aspecto similar a las auténticas. Por ejemplo, un famoso creador de monedas fue Giovanni Cavino (1500-1570), un grabador italiano llamado “El Paduano”; muchas de sus creaciones inclusive son conservadas junto con monedas verdaderas para demostrar su habilidad artística.
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